#1989 #DespistesYFranquezas #EscritoresUruguayos
Quieren que me refugie en vos palabra blanda silaboba que crea a pie juntillas que sos m… monasterio tantas cosas
Las voces de abajo vidalitá están casi mudas pero los gendarmes vidalitá
Los años vienen con raíces y algas y sueños remontados en la ola con los años también todo se olvid… los ritos del placer la noche vege… la alegría que ataca por el flanco
Ustedes cuando aman exigen bienestar una cama de cedro y un colchón especial nosotros cuando amamos
La pena aletea como un fuego fatuo sobre los cementerios y otras verb… es un fantasma de mejillas blancas que se duele de todos y de nadie la pena sueña con amaneceres / llo…
Con todas las letras y con todos l… dijo mi amigo que la moral era ana… mi amigo dijo que había que ser re… después llegaron los capitanes del… hicieron el consabido acopio de sí…
Hasta ayer instalaron confesiones y ofertas en el living de mi alma… tomaría una caña pero hay veda de paciencia pronósticos y alcohol he de reflexionar porque mañana
Sé que no bastarían las mejores enredaderas del verano para cubrir el muro de mis lamentos lo curioso es que esos plañidos
Y ya que en un descuido sale el so… y un cauto optimismo inunda los mu… y una clemente tregüita se instala… qué les parece si nos tomamos un r… para escurrir la angustia y ponerl…
Sólo hasta ayer fui joven hoy empecé a ser viejo desde el mal bienestar
Rojo / como el que más / radiante vino rojo la herida de las vírgenes el crepúsculo fucsia el toro ya vencido
El profeta lo dijo en la plaza: «Dentro de veinte años el Señor descenderá nuevamente a la tierra. Y habrá justicia», pero los descreídos le gritaron: «Es muy cómodo predecir lo que va ...
Amílcar, viejo compinche: Te extrañará recibir esta carta quilométrica, pero a alguien tengo que contarle mi historia y por algo sos mi amigo, ¿no? Vos bien sabés que técnicamente nunca...
Cielito cielo que sí cielito del 26 las nubes van allá arriba la tierra bajo los pies que haya espesos nubarrones
Usted que se desliza sobre el tiempo, usted que saca punta y se persigna, usted, modesto anfibio,