(1939)
#EscritoresMexicanos
Los conejos mañaneros se levantan los primeros, y moviendo las orejas se van. Van al horno pues les gusta
Dime pajarito si para cantar mueves el piquito para arriba y para abajo sin parar.
Hoy pasó un chivo arrastrando un carricoche que sonaba al viajar. En sus cuatro ruedas, un derroche de campanas
Escondida por los rincones, temerosa de que alguien la vea, platicaba con los ratones la pobre muñeca fea. Un bracito ya se le rompió,
A la hora en que la luna se asoma tras el tejado, inclinada sobre la cuna la Coneja está con cuidado. Su conejito cayó enfermito
Don Perfidio Malaentraña, hechicero de postín, como los de su calaña es malvado, bajo y ruin. En las sombras de la noche,
Salta que te salta por el bosque, iba Doña Ardilla con una sombrilla azul, entre la fragancia de los pinos y el perfume de eucaliptos y abedu…
(Beeee...) Mi borreguito está enf… (beeee...), no sé que tiene el pob… Fuimos a ver al doctor, que es un sabio y buen señor, y tras de sus lentes
Al fondo del barril desvencijado que alumbra un rayo de sol, la araña en sus hilos baila tango con los acordes del bandoneón. Don Gato imita el instrumento
Allá en el viejo bosque hay una casita, si vas allá te has de asomar, y por la ventana
Un banquito quisiera comprar, un banquito con sus cuatro patas, para en ellas poderles calzar un surtido cabal de alpargatas. Y luego irle enseñando,
Un perrito, una zorra, un ratón, y ya son tres. Qué curioso, qué bonito, todos tienen cuatro pies. Pero al rato vino un pato
Era un chivo en bicicleta sin saber andar. Contra la banqueta el manubrio fue a clavar. “¡Que se cae, que se cae,
Chonita tiene un cotorro que es el tormento de su corazón; le dice: “Vidita, mi cielo, mi rorro, mi güero, ¡mi dulce pasi…
Con su garrote, con su morral, viene un conejo por el trigal. Animalejo, ven hacia acá, ¡hola, conejo! ¿cómo te va? Conejito, ¿Cómo te llamas