#EscritoresUruguayos (1997) La ese paréntesis vida,
Para que pueda ser he de ser otro, salir de mí, buscarme entre los ot… los otros que no son si yo no exis… los otros que me dan plena existen… —Octavio Paz
Desde el octavo piso de mi tercer… veo el mar excesivo que me prestan mercado viejo al norte donde el qu… se llama luz brillante y al oeste otro mercado el nuevo adonde llega…
La paz oh la paz quién habló de la paz aquel viejo con cara de caballo que mira sin mirar y a veces pide ése habló de la paz
Tal vez en un desnudo amanecer con… ese frío corpóreo y a la vez trans… que viene desde arriba como el ojo… en un exacto mundo todavía con árb… todavía con monstruos y rocío y pr…
Quién hubiera dicho que estos poemas de otros iban a ser míos después de todo hay hombres que no…
El marciano llegó en una nave reducida, casi portátil, algo así como un Volkswagen del espacio. Además de su propia lengua, sólo hablaba inglés, pero no el de la BBC sino el de Shakespe...
Al espantapájaros no le importa el… más bien lo hastía su obligación g… y además se siente desolado con su sombrero roto y sus andrajo… al espantapájaros no le importan l…
Los abruptos pueden ser violentos tozudos y hasta sectarios pero los
Mi saldo disminuye cada día qué digo cada día cada minuto cada bocanada de aire muevo mis dedos como si pudieran
A esta altura ya nadie me nombra por mi nombre: Octavio. Todos me llaman abuelo. Incluida mi propia hija. Cuando uno tiene, como yo, ochenta y cuatro años, qué más puede pedir. No pido ...
Estaba a duras penas comprendiendo y me encontré en la calle como per… los gritos y bocinas se colaban insolentes en mi áspera congoja palpé las cicatrices que dejó tu m…
Paso que pasa rostro que pasabas qué más quieres te miro después me olvidaré
Bajé al mercado y traje tomates diarios aguacero endivias y envidias gambas grupas y amenes
Un país lejano puede estar cerca puede quedar a la vuelta del pan pero también puede irse despacito y hasta borrar sus huellas en ese caso no hay que rastrearlo
En primavera cuando surgen las consabidas muchachas de ojos v… y el nuevo viento agita con espera… antenas y divisas y follajes