(1912)
#EscritoresMexicanos 1912 25, Julio
¡Hasta sus perfumes duran más que… Ved aquí los frascos, que apenas u… y que reconstruyen para mí la huel… sutíl que en la casa dejó... Herméticamente encerrada,
Para calmar a veces un poco el sob… el invencible anhelo de volverte a… me imagino que viajas por un país… de donde es muy difícil, ¡muy difí… Así mi desconsuelo, tan hondo, se…
Había un ángel cerca de mí, mas no le vi... Posó las plantas maravillosas entre las zarzas de mi erial, y yo, en tanto, estaba viendo otras…
Bien sé que para verte he menester la alquimia de la muer… que me transmute en alma, y delira… de amor y de ansiedad, a cada inst… que llega, lo requiero
Atiborrado de filosofía, por culpa del afán que me devora, yo, que ya me sabía dos gramos del vivir, nada sé ahor… De tanto preguntar
“Vivir sin tus caricias es mucho d… vivir sin tus palabras es mucha so… vivir sin tu amoroso mirar, ingenu… es mucha oscuridad...” Vuelvo pálida novia, que solías
Bien sé, devota mujer, cuando te contemplo en tus fervores y celo arder, que no me puedes querer como quieres a Jesús.
¡Con ella, todo; sin ella, nada! Para qué viajes, cielos, paisajes, ¡Qué importan soles en la jornada! Qué más me da
Sí, yo amaba lo azul con ardimient… las montañas excelsas, los sutiles crespones de zafir del firmamento, el piélago sin fin, cuyo lamento arrulló mis ensueños juveniles.
¡Oh, Señor! Dios de los ejércitos… eterno Padre, eterno Rey, por este mundo que creaste con la virtud de tu poder; porque dijiste: la luz sea,
La santidad de la muerte llenó de paz tu semblante, y yo no puedo ya verte de mi memoria delante, sino en el sosiego inerte
La canción que me pediste, la compuse y aquí está; cántala bajito y triste: ella duerme (para siempre); la can… Cántala bajito y triste,
Como renuevos cuyos aliños un viento helado marchita en flor, así cayeron los héroes niños ante las balas del invasor. Allí fue... los sabinos la cimera
Pasó con su madre. ¡Qué rara bell… ¡Qué rubios cabellos de trigo garz… ¡Qué ritmo en el paso! ¡Qué innat… de porte! ¡Qué formas bajo el fino… Pasó con su madre. Volvió la cabe…
¡Oh reyes, me trajisteis hace un a… excepcional: un gran dolor! Fuisteis conmigo pródigos, cual mo… Oriente, Baltasar, Gaspar y Melchor.