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¡Alto pinar! Cuatro palomas por el aire van. Cuatro palomas vuelan y tornan. Llevan heridas
Por el arco de Elvira quiero verte pasar Para saber tu nombre y ponerme a llorar. ¿Qué luna gris de las nueve
El río Guadalquivir va entre naranjos y olivos. Los dos ríos de Granada bajan de la nieve al trigo. ¡Ay, amor
Altas torres. Largos ríos. Hada Toma el anillo de bodas que llevaron tus abuelos.
Se tendió la vaca herida; árboles y arroyos trepaban por sus… Su hocico sangraba en el cielo. Su hocico de abejas bajo el bigote lento de la baba.
Los laberintos que crea el tiempo, se desvanecen. (Sólo queda el desierto.)
El corazón, Que tenía en la escuela Donde estuvo pintada La cartilla primera, ¿Está en ti,
En lo alto de aquel monte hay un arbolito verde. Pastor que vas, pastor que vienes. Olivares soñolientos
Por las orillas del río se está la noche mojando y en los pechos de Lolita se mueren de amor los ramos. Se mueren de amor los ramos.
Yo decía: “Tarde” Pero no era así. La tarde era otra cosa que ya se había marchado. (Y la luz encogía
Por una vereda venía Don Pedro. ¡Ay cómo lloraba el caballero! Montado en un ágil
Campanas de Córdoba en la madrugada. Campanas de amanecer en Granada. Os sienten todas las muchachas
Dicen que tienes cara (balalín) de luna llena. (balalán.) Cuántas campanas ¿oyes?
La guitarra, hace llorar a los sueños. El sollozo de las almas perdidas, se escapa por su boca
Salen los niños alegres de la escuela, poniendo en el aire tibio del abril canciones tiernas. ¡Qué alegría tiene el hondo