#Españoles Cántico Revista
Árboles de la sierra que nos viste… vosotros que aspiráis por todo vue… el azul perfumado, la púrpura del… Vosotros, sin palabras, cuyo tiern… no alarmaría ni a una paloma adorm…
Hora de amor. Qué dios envenena m… con labios que sonríen y ojos verd… mientras la tarde en su jardín me… y me incendia y abrasa con sus páj… Pasos míos, ¿adónde me lleváis?
En las tardes de mayo cuando el ai… con un azul radiante y en las olas… se mecía la blanca flor de la sang… te amaba casi más que a nadie en e… Por tus ojos tan graves del color…
No lo creía entonces. Pasaron mes… Menos yo y este amor, todo ha camb… No creí que pudiera volver a ti, p… Lo necesario estaba en las cosas q… Lo necesario era tan bello y pasaj…
No es posible esquivar este cuerpo… no es posible olvidarse de los ojo… el cuello y las mejillas y los bra… y los pies y los muslos y el vient… y el alma repartida
Muerta la flor, la flor que ama el… muerto el amante, amado de la luna… la luna queda —soledad colmada—, flor, amante, recuerdo...
Qué buscas por el río entre los bl… oh, amor, oh, amor de manos de jac… ¿Qué buscas esta tarde de setiembr… ¿Qué agradable misterio halaga tus… En los cañaverales juega el viento
¿Por qué nos diste el don de admir… y corazón ardiente para amarla? ¿Por qué en la negra noche del des… constelación de ávidos sentidos? ¿Por qué nos diste ojos para ver e…
Estoy desnudo, el sol con fuego di… cuanto diría el hombre enamorado. Basta el silencio a confesarlo tod… si tendido en la orilla de algún r… el hombre calla y en su pecho, mud…
Ámame sólo como amarías al viento cuando pasa en un largo suspiro ha… Ámame sólo como amarías al viento que nada sabe del alma de las rosa… ni de los seres inmóviles del mund…
Esta es mi vida tal como la soñé e… un largo muro de barro perfumado y… que rodea un espeso jardín, árboles cuyas ramas se besan en el… pavos reales en la penumbra de las…
El patio oye el suspiro de otros d… En las paredes húmedas se estremec… Lilas, jazmines y celindas tiemblan gozosos en el aire tibio bajo el beso fugaz de las abejas,
Más no supieron nunca que nos amamos, y la fuente que llora solitaria en la sombra nunca vio reflejarse nuestra dicha
Oscura era tu vida en aquel pueblo… Lo conocías todo, el muro, la call… el viejo Ayuntamiento, destartalad… la fuente, la estación, la sacrist… La tuya debió ser juventud de ojos…
El árbol chorreando ante la iglesi… bajo la lluvia espesa y fina era una esperanza muerta en el inviern… Sobre la húmeda torre, los celajes deshechos y blanquísimos mostraban