De «Error binario del huevo de oro»
Desperté afuera de Borges para si…
con la mano izquierda escribamos a… en honor a los zurdos, en contra d… o usemos hoy nada más que el lado… imaginemos con el zurdo músculo in… no perdamos la ocasión, seamos zur…
No importa el lado de la puerta que nos vea. El afuera siempre está adentro.
—¡Mira, una estrella fugaz! —¿Qué pasa con las estrellas fugac… —Que se debe pedir un deseo. —Ah… —¡Pídelo!
Adivinaciones vetustas renaciendo… Genios científicos estudiados por… Grandes pasos para la humanidad má… Primer nuevo paso del big bang otr… Consecuencias de la quietud del mu…
Gano dinero de mil maneras pero no haciendo poesía. Estoy a salvo. Por ahora.
La veo acercarse, por mí. Sin traje de gala arrima, sin armas. De albo fulgoroso viste sus negras empresas. La veo cada noche, en mi cama,
Para que los libros estén en todos los lugares.
fui niño y lo supe
—¿Qué vendes? —Poemas. —¿Cuánto valen? —No tienen precio.
La humanidad vino de un árbol que… La humanidad es una pared a punto… La humanidad, conmigo adentro, es…
Dios existe lo acabo de inventar.
—¿Estudias o trabajas? —Soy escritor.
Más que temerle a qué dirán le temo al qué diré.
La poesía es como los relojes: funcionan todos igual, pero diferente. Como el pan antes de serlo,