Alas de Brea ©2022 Tomás Osorio del Río
Extraño el sueño de su mirada cau… inclemente, acusada, disruptiva, y tiéntame el verso, para que yo l… Amor aprisióname en tu juego onírico;
Irina, si mis ojos sueñan, Irina a mis sentidos frena. Risueña su risiña quema Y calma la ira de mis venas Irina, con su piel de cobre
Amor por reconocer, éxtasis de anciano Apolo, quien reclama por antojo su entero desvanecer. Acallaste a sus amores.
La senda manchada en refriegas denota escasez en la sed que de sangre empaña sus guerras. La guerra aclamada en hiatus se nutre en su pena,
El árbol de espirales busca esa flor que le acompañe todas se niegan flores excepto el diente sin amarre Cuerpo y tronco de árbol
Es toda arte un artificio de un en… en literatura la palabra susurrant… que acompaña a lo inferido e imaginado por sus seres errantes… No conozco arte más bello
De papeles, la montaña que te ahorca en su sendero, todo aquel es testimonio si lo entierra su heredero. ¿Quién, tras ellos, escribe
Es el agua ese mal tan necesario que agasaja a los infantes y los calma con su ahogar. Así se siente un niño
En la expresión del espejo observo la frialdad de esa sonrisa como una caries que se expande en los llantos, sin empeño. A esta crisis que me rompe
Concédeme esta tentación, la ocasión de tumbarme en las ramas de tu cama. Te muestras, mujer fatal,
¿Por qué sulfura en estas hojas se… ¿Por qué dormitan estas ramas ante… ¿Por qué permanece esta madera? Quiere morir la primavera Tras apaciguar el sol sus llamas e…
Golpea en las farolas boxeador escandaloso cada golpe es el olvido arremetido por las olas. En tu puño está el castigo
Si muero, no me importa, tú sonríe, con esos ojos, con ese brillo, ríeme al oído para poder escuchar
Redondez glaseada, su óvalo, en su azúcar, imprégnate, sangre m… nútrase anómalo órgano, expóliese en cada surtido; Uróboros, estudiante tardío,
En la sala otorga el niño sus pala… resurgen de los vapores del alma, y tres imágenes recrea. La una es el “yo niño” en la cama; segunda es la caricia, su llama,