08/13/2018
#Pensamiento
¡Pobre Arlequín! lloran tus ojos… aunque en tu rostro exista la sonr… sólo es tuyo el lamento de la bris… que con amor y gran ternura vistes… ¡Tú, mi Arlequín! que escasamente…
Cuando me abrazas, la vida se detiene. Es el consuelo de unir nuestros latidos y entregarnos los dos.
Lo irrealizable, lo imaginario o lo fantástico, es una posible utopía. Para mí,
Desde mi ventana todo parece igual, los árboles o aquella pared que una vez estuvo llena de musgo dando un verdor húmedo a mi jardín, pero no es cierto... Había un árbol grande que ya n...
Corro sin cesar y el rugir del viento me golpea. Los sauces implacables y desafiantes,
¿Amor de madre? va en una dirección. ¡Hacia adelante!
Gracias te doy por estar presente en el día a día. Tu amistad sincera es regocijo y aliento.
¡Pasan los días! Lentos, implacables con esa letanía que se convierte
Te observo lleno de años y de hist… decorando el final de ese sendero, y tú, árbol milenario te alzas fie… donde amarillas flores ríen gloria… Te miro y oigo todas tus memorias
¡Cuanta hermosura! río, árbol, viento, flor. Lluvia de abril.
Gran río azul de aguas verdes y frías. Corre tranquilo, aunque el peso de tu profundidad te agobie.
Amanecer de un domingo gris, lleno ¡de abrazos! ¡de despedidas!
La cigüeña se aferra a su alto nido y mira airosa. Son sus potentes alas amparo de su prole.
Bajo la luna, las gotas de rocío, ¿turban mi sueño?
¡Cuantas historias! Una mirada así, lo dice todo.