No siempre tenemos fuerza para enfrentar lo imposible. Sin embargo, la encontramos. Nos paramos. Siempre.
Ayer fui a saludarte y me detuviste un segundo. Pusiste tu mano en mí y dejaste que el ambiente fuese decorado por las voces
Sembremos sueños, doncella, para un día cosecharlos. Sembremos anhelo, nardo cual vara de san José fragrante florece un mes
Tanto tiempo olvidada, oh alma mía… encerrada en las penurias de un mu… que se olvida una y otra vez que e… para ser feliz. ¡Oh alma! Ahora voy a escucharte.
La presión alterada, los pensamientos ofuscados... todo un disparate traerte a la memoria. ¿Por qué te recuerdo?
Quiero volar muy alto por las mont… —libertad madura de quien deja el… Veo a mis hermanos ya extender sus… y realizar proezas en el aire. Los admiro.
Quiero, quiero tanto, quiero mucho, quiero harto. La vida es un sueño bello, un ideal sin ocaso, un gozo, un gran destello,
El mar tranquilo se goza, el mar tranquilo está. Nada sobre él se posa que lo pueda lastimar. Pasan las tormentas lentas,
Esperar lo eterno, la misión, el llamado que nunca ocurrió; tener la esperanza puesta en ti con el corazón alerta, atento, y la pregunta: «¿vendrás por mí?»
¡Cómo! ¿Me prohibes amar? ¡Qué furia! ¡Qué tormento siento! ¿Desquitarme? Quisiera. ¡Ay! ¡Agonía entera! Quiero llorar; ¡mejor sangrar!
Que sea feliz, me pediste. Tu último ruego: ser feliz. Que me perdone, me dijiste, por alejarme de ti así. Por los días que no estuvimos,
Extraño ver tus ojos, noble dama, contemplar tu silueta frente al ma… sentir tu mano acariciar mi cuello… abrazar tu cuerpo como quien te am… respirar la fragancia de tu estar.
Volverás a mis brazos un día y besaré tus labios, morena. Besaré tu rostro y tu figura; besaré tus manos con locura. Sí, besaré tu alma con porfía;
He visto cosas extraordinarias que la imaginación no comprende. Sí, he visto cosas que estremecen, que asombran, que inspiran y que e… ¿Te cuento?
Cambiaría uno de mis suspiros por uno de los tuyos. ¡Cómo me encantaría volver a esos días bellos, a esos días contigo,