Me gusta la madrugada porque está como para dedicarte un desvelo, como para presumirte ante la luna, como para encargarte

Quisiera ser lo que buscas, lo que quieres, lo que necesitas, lo que mereces.

“Pero así me quieres” era su frase cuando me hacía enoja… y tenía razón...

Dedícame ese minuto que tienes ocu… concédeme ese beso que no quieres… invítame ese café que no se te ant… entrégame ese amor que no te nace, hazme tu excepción.

Hay amores que no pueden quedarse porque están destinados a vagar, a jugar con corazones inocentes y a destruir todo lo que está a su… Invítales un café, un beso

A otros amores les dediqué poemas… pero a ninguno le dediqué la vida…

No creo estar extrañándote, simplemente me está sobrando el tiempo que te dedicaba, me está sobrando el café

Qué linda tu boca, que cumple fant… qué lindo tu pecho, que guarda poe… qué lindas tus manos, que acaricia…

Me gustas para cosas tan simples como ver una película y me gustas para cosas tan complej… como ver los años pasar.