Hay quien hace de su vida una fron… Otros la comparten como aire, luz, o la levantan sobre un campo de mi… Quien la deja al azar, y el que a control severo la somet…

Morir es no volver a estar a la misma hora, en los mismos lugares, con las mismas personas. No aparecer, cada mañana,

Los inmigrantes caminan por las calles con mortajas al hombro, lápidas al hombro, cruces al hombro, lágrimas al hombro, corazones en las manos, el cielo sobre un desierto en su mirada. ...

Un día el gato, jugueteando, tiró al suelo mi reloj –su maquina… se detuvo. Estrafalario, gruñón, el relojero, mientras inspecciona las esferas,

De niño yo veía en Zaragoza rinocerontes con cabeza de hombre, hombres con cabeza de pistola, hombres con cabeza de falo, hombres con cabeza de copón, hombres con cabeza de mardano, con...

Fuera de ti no esperes encontrar lo que dentro de ti nunca has busc… No es más hermoso el sol de otros… por lejanos que estén: lo que importa es la luz que da vi…

¡De voces está llena mi cabeza! Voces de aparecidos, voces nuevas, del destino, desconocidas o proféticas, voces del centro de la tierra, voces inquietantes, amordazadas, metálicas, de...

Como cuando uno vuelve a los lugares de la infancia y, sobrecogido, con decepción, se… (pues los hacía más grandes, mágicos, misteriosos),

Laberinto en Soledad Demoníaca. No te será posible la escapada. Asesino de tu madre, traficante de muerte, condenado eternamente a no dar vid…

Tu piel es la profundidad de mi de…

Saber que estás conmigo sin dejar de estar en ti. Hay amor sin presencia. Quererte como te quiere la vida:

No sé, escucho himnos dentro de la… Tuve una casa con ventanas en el t… veía tiburones, cordilleras, trene… Tal vez vosotros sabéis, yo sólo c… No sé bien qué es la paz:

Toda la luz del mundo pasa por tu…

de sangre el hombre de humo viaja a la velocidad del furor en un coche con neumáticos de alcohol, llantas de irritación y cafeína! Desciende a tumba abierta un puerto. Esnifa con sus o...

Todo armoniza por la diferencia: el desierto de hielo, el árbol en… la suave furia del mar y las estre… Nacemos transparentes como el aire… nos volvemos opacos como el mármol…