Ivonne
Son las 5 am, y no he dormido nada. No escribo esto para que lo leas; lo escribo para sacarlo de mí.
Quizás, en algunos años, voy a mirar estos textos y me va a dar pena. No obstante, todo lo que existe en el ambito de lo que es real es el presente momento, y en este momento me siento así. Mis sentimientos, aunque tontos, existen y son válidos porque no sé qué hacer más allá de sentir y llorar.
Por no dejarme definir por la concepción ajena de lo que es y no es real, válido, te digo que aunque nunca te haya conocido, me da tanto gusto que existas en algun lugar de este mundo. Te agradezco infinitamente, con todo mi corazón, por la atención y cariño que me diste, por todas las horas en que me escuchaste, por estar. Te amo, chica.
Tú mereces todos los días bonitos de Enero, con cielos azules y sol, aunque para ti sea el invierno. Te mereces besos dulces y momentos de ternura. Mereces flores y toda la naturaleza que te rodea, el olor después de una tormenta y el verde de los árboles mientras el viento te hace sentir viva. Mereces todo el amor que existe en esta vida y en todas las otras. Muchísimas gracias.
