Pálida, en la penumbra de un fugit… igual que un lirio triste al claro… te miré en una noche, desnudando e… ropaje coronado por tu melena brun… Me acerqué... Desflorando mi boca…
Una tela de araña temblorosa bajo el pálido beso de la luna. Una rosa otoñal, un lirio, una rosa que se deshoja silenciosa. La queja apasionada y dolorosa
Melancolía, madre mía, en tu regazo he de dormir, y he de cantar, melancolía, el dulce orgullo de sufrir. Yo soy el rey abandonado
Mi juventud se torna grave y seren… un vespertino trozo de paisaje en… la ebullición sonora de aquel prim… primaveral, deshízose lentamente e… Tu risa de oro, de cristal, de pla…
Para mí tu recuerdo es hoy como la… del fantasma a quien dimos el nomb… Yo fui bueno contigo, tu desdén no… pues no me debes nada, ni te repro… Yo fui bueno contigo como una flor…
Prenda sobre tu seno esta rosada r… ebria de brisa y ebria de caricia… para que su alma entera se deshoje… sobre la roja y virgen flor de tu… Tu hermana Primavera cante un ari…
A Francisco Guarderas Hermano, si me río de la vida y su… notarás en mi risa cierto rezo de… sentirás las espinas que hay en to… comprenderás que casi mis flores e…
¡Madre Locura! Quiero ponerme tus… Quiero en tus cascabeles beber la… y al son de las sonajas y de las p… frivolizar la vida con divina inco… ¡Madre Locura! Dame la sardónica…
Oh! tarde dolorosa que con tu ciel… finges las alegrías de un declinar… ¡Tarde! Las hojas secas en su dol… van llenando mi alma de un angusti… La risa de la fuente me parece ser…
(...) Por el jardín de primavera yerra una brisa suave... (...Era su rubia cabellera como el ala de un ave
¡Oh, cómo te miraban las tinieblas… cuando ciñendo el nudo de tu abraz… a mi garganta, mientras yo espolea… el formidable ijar de aquel caball… cruzábamos la selva temblorosa
Fue como un cisne blanco que se al… y se aleja, suave, dulcemente por el cristal azul de la corrient… como una vaga y misteriosa queja. Me queda su visión. Era una vieja
Para ti mi pensamiento, para ti mi corazón; para ti, flor de tormento, mi pasión. Y que dos cercos violados
¿Qué habrá sido de aquella morenit… trigo tostado al sol –que una maña… me sorprendió mirando a su ventana… Tal vez murió, pero en mí resucita… Tiene en mi alma un recuerdo de he…
En el blanco cementerio fue la cita. Tú viniste toda dulzura y misterio, delicadamente triste… Tu voz fina y temblorosa