Recogido por Esteban Peicovich en su libro "Borges, el palabrista"
#Argentinos #PremioCervantes #SigloXX
Ésta es el alba. Es anterior a sus mitologías y al… Engendrará los lobos y la serpient… que también es el mar. El tiempo no la roza.
Cuenta la historia que en aquel pa… tiempo en que sucedieron tantas co… reales, imaginarias y dudosas, un hombre concibió el desmesurado proyecto de cifrar el universo
Soy el único hombre en la tierra y… Acaso un dios me engaña. Acaso un dios me ha condenado al t… Sueño la luna y sueño mis ojos que… He soñado la tarde y la mañana del…
Ahí está lo que fue: la terca espa… del sajón y su métrica de hierro, los mares y las islas del destierr… del hijo de Laertes, la dorada luna del persa y los sin fin jardi…
La larga postración lo ha acostumb… a anticipar la muerte. Le daría miedo salir al clamoroso día y andar entre los hombres. Derriba… Enrique Heine piensa en aquel río…
Madre antigua y atroz de la incest… borrado sea tu nombre de la faz de… Tú que arrojaste al círculo del ho… la alta proa del viking, las lanza… En la Torre del Hambre de Ugolin…
El ejercicio de la literatura puede enseñarnos a eludir equivocaciones, no a merecer hallazgos. Nos revela nuestras imposibilidades, nuestros severos límites. Al cabo de los años, he co...
¿Por qué al hacer girar la cerradu… vuelve a mis ojos con asombro anti… el grabado de un tártaro que enlaz… desde el caballo un lobo de la est… La fiera se revuelve eternamente.
Mi nombre es Alejandro Ferri. Ecos marciales hay en él, pero ni los metales de la gloria ni la gran sombra del macedonio—la frase es del autor de Los mármoles, cuya amistad me honró—se...
En Buenos Aires el Zahir es una moneda común de veinte centavos; marcas de navaja o de cortaplumas rayan las letras N T y el número dos; 1929 es la fecha grabada en el anverso....
El hombre se despierta de un incie… sueño de alfanjes y de campo llano y se toca la barba con la mano y se pregunta si está herido o mue… ¿No lo perseguirán los hechiceros
Los hombres inventaron el adiós po…
El poniente impecable en esplendor… quebró a filo de espada las distan… Suave como un sauzal está la noche… Rojos chisporrotean los remolinos de las bruscas hogue…
El arco del Señor surca la esfera Y nos bendice. En el gran arco pu… Están las bendiciones del futuro, Pero también está mi amor, que esp… La moneda cayó en mi hueca mano.
Antes la luz entraba más temprano en la pieza que da al último patio… ahora la vecina casa de altos le quita el sol, pero en la vaga s… su modesto inquilino está despiert…