Recogido por Esteban Peicovich en su libro "Borges, el palabrista"
#EscritoresArgentinos
Fuera de Emma Zunz (cuyo argumento espléndido, tan superior a su ejecución temerosa, me fue dado por Cecilia Ingenieros) y de la Historia del guerrero y de la cautiva que se pr...
De estas calles que ahondan el pon… una habrá (no sé cuál) que he reco… ya por última vez, indiferente y sin adivinarlo, sometido a quien prefija omnipotentes norma…
Aunque de ejecución menos torpe, las piezas de este libro no difieren de las que forman el anterior. Dos, acaso, permiten una mención detenida: La muerte y la brújula, Funes el...
Las naves de alto bordo, las azule… espadas que partieron de Noruega, de tu Noruega y depredaron mares y dejaron al tiempo y a sus días los epitafios de las piedras rúnic…
Las tardes que serán y las que han… son una sola, inconcebiblemente. Son un claro cristal, solo y dolie… inaccesible al tiempo y a su olvid… Son los espejos de esa tarde etern…
Cuadrúpedo en la aurora, alto en e… y con tres pies errando por el van… ámbito de la tarde, así veía la eterna esfinge a su inconstante… el hombre, y con la tarde un hombr…
La idea de que uno va a desaparece…
Indescifrada y sola, sé que puedo ser en la vaga noche una plegaria de bronce o la sentencia en que se… el sabor de una vida o de una tard… o el sueño de Chuang Tzu, que ya…
Pienso en las cosas que pudieron s… El tratado de mitología sajona que… La obra inconcebible que a Dante… La historia sin la tarde de la Cr… La historia sin el rostro de Hele…
¡Cuántas cosas iguales! El jinete… la tradición de espadas, la plata… el piadoso benjuí que sahúma la al… y ese latín venido a menos, el cas… ¡Cuántas cosas distintas! Una mit…
Nadie a tu lado. Anoche maté a un hombre en la bata… Era animoso y alto, de la clara es… La espada entró en el pecho, un po… Rodó por tierra y fue una cosa,
Recuerdo que una vez conversé con muchachones que estaban ahí, en la Plaza San Martín de Buenos Aires, cantando “Perón, Perón, qué grande sos”. Bueno... Yo estaba con una amiga y los do...
Menos copiosa que cierta enciclopedia china que abarca mil veintiocho tomos de doscientas páginas en octavo cada uno, la nueva Enciclopedia Francesa que dirige, rodeado de especialistas...
Pude haber sido un mártir. Fui un… Purifiqué las almas con el fuego. Para salvar la mía, busqué el rueg… el cilicio, las lágrimas y el yugo… En los autos de fe vi lo que había
Al cabo de veinte años de trabajos y de extraña aventura, Ulises hijo de Laertes vuelve a su Ítaca. Con la espada de hierro y con el arco ejecuta la debida venganza. Atónita hasta el mi...