“ ARDUAMENTE ”
Por: Cesar Abraham Koh Ware
estoy sentado, esperando el mensaje del
espacio, inspirado, de lo que algún día paso,
entre dolor y sueños cortos, surgieron algunos
sentimientos ignorados.
Alas cortadas, pensamientos fugaces, nubes grises,
voces extrañas que me dicen que cometa estupideces
por ejemplo, que vuela donde algún día estuve, en tus
brazos.
Sentado en el parque, me acorte de aquella tarde, un poco
nublada de hecho, decían voces que me querían, voces sin
fundamento, palabras que no tenían sentido, como queriendo
sacar un clavo con otro.
Abrazos fingidos, besos casi forzados, que luchaban entre si por
que no sabían si realmente se querían juntos, es irónico pensar
que tuve que pasar por esto o mas, para darme cuenta otra ves, que
mi mundo es diferente de los demás de los otros no solo del tamaño,
formas, o colores.
Mas bien, de lo que ahí adentro, algunos son confusos, violentos,
amargos como un trago de un buen tequila reposado.
Hoy veo la vida distinta, mas clara que otros días, y me marea mas que una
bocanada grande de tabaco, pensar tanto, creo que terminare como
Frederick Nietzsche, o mas loco.
Poco a poco estoy conociendo personas aparentemente iguales a mi, y eso me
agrada, no esperare mucho, claro, esta vez tendré mis reservas.
Pero seré el mismo, solo sera mas cauteloso, mas reservado, y poco a poco, si
veo que aquel ser hermoso, de demuestra su resplandor, su verdadera yo, ahí;
si ahí conocerá al verdadero cesar, que en verdad no soy malo, soy como un
pan de Dios remojado en leche cortada, apasionado por la música, por las
artes, el que ha buscado arduamente el verdadero amor, el amor puro, sin reservas,
sin justificaciones, ese que daría todo, absolutamente todo por el otro, así
como yo me considero, y lo he demostrado a muchos seres, que infortunadamente
me han fallado, decepcionado, lastimado.
pero a causa de eso, me he hecho mas fuerte como un roble, pero por dentro, mas tierno
y dulce que las pinturas de Nino Chakvetadze.
10/06/2016
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