Ships in harbor, by Robert Salmon
D.A.M.

Pensamientos de Alguien Ligeramente Trastornado.

Querida, ya deberías saberlo; Todos mis poemas siempre son para ti.

Y en ese momento; las flores comienzan a marchitarse. Los libros se acaban y las palabras mueren rápidamente. Me sentí ahogado y tuve que buscar una manera de empezar una vez más. Tuve miedo y creí que solo era un sueño, si lo fue, pero fue mi sueño cumplido. Y aunque me amaste por un muy corto lapso de tiempo, yo te he guardado cariño y te llevare en mi corazón por los siglos de los siglos... así es y así será porque simplemente es algo natural. Ambos tuvimos razón pero las razones no fueron iguales. Es la ironía de la vida que nos mueve en direcciones opuestas, y luego nos convoca a un mismo lugar junto con el diablo y un par de personas más. O tal vez es que ya he perdido tantas oportunidades... me pregunte ¿Por qué nunca llueve? Fui un tonto, pero es entendible; soy hombre, y así son los hombres. Soy un tonto porque TE AMO y aunque no sirva de nada es lo que yo hago. Tuve buenos días y solo una fue un maldito lindo día. Ahora entiendo tantas cosas, solo hace falta un poco de realidad para saber que después de mi funeral me olvidaras más rápido de lo que mueren las abejas.

El cielo me mintió toda una eternidad pero fue el tiempo quien me despertó para hacerme saber que estamos destinados a no ser. Solo quise un poco de ti y deje que me consumieras a cenizas. También creí que cualquier título era el correcto pero solo hay uno que iría de la mano con este escrito. Lo fuiste todo pero no fuiste nada y ahora solo quedo un triste libro con Pensamientos de Alguien Ligeramente Trastornado.




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