Somos como peces en silencio
persiguiendo nuestros sueños,
sueños de miel,
sueños de hiel.
Cuando el espacio se refleja
en una negra sabana de seda
y esta a su vez se refleja sobre
el agua sin alma, el agua salda
nos podremos confundir
y nadar lejos de aquí.
Mundos, mundos de estrellas,
todas son como sirenas.
Mitad de aquí,
mitad sin ti.
Y si me preguntas por tu nombre.
No podre distinguir entre las letras y sufrir, más fotos de aquí,
quizá son los recuerdos de la vida que acabo de dejar
el plano terrenal no me alcanzo a llenar.
Nadar en la nada por nada, dispuesto a apostar por el reflejo simple y efímero de un universo.
Puesto que apuesto que ni tú, ni yo, ni la sirena mitad recuerdo mitad nada, lo podremos alcanzar.