POESÍA JAPONESA
Se oyó un taconeo en el silencio de la iglesia, una mujer avanzaba hacia los primeros bancos, llegó al primero, se arrodilló, agacho la cabeza, no se oía nada, pero sus labios se veían ...
Maga de tierra magia dentro de su alma cuida los bosques Solitario hombre mariposa azul vuela
Extraño el sabor de tus labios el abrazo fuerte de tus brazos la mirada felina mirándome con la tentación saliendo del iris… Los pies fríos
En aquel campo miro la margarita de blancos pétalos. Flores de primavera adivinas de amores.
Quiero hacer versos poemas en tu cuerpo lira tu boca poesía en la piel sedosa de tus muslos.
Eres la aguja en la que ensarto el hilo, haciendo pespuntes en tu espalda. Bordo con color rojo tus muslos calientes por el sol
Enredada en tus brazos, mi lengua recorriendo tu piel. Nuestros cuerpos desnudos los ilumina la luna.
Son muchos días viendo como se escapa mi risa, de extrañar la persona que conocí, no sé dónde ha ido pero tú solo tienes su cara.
Medias de seda esperan manos suaves dedos las rozan enervando sentidos erizando la piel.
Bajo el cielo de Granada vuela una vieja melodía hablando de amor, una guitarra suena en la tarde soleada.
Mi vecino era un travesti, de maquillaje barato, y ropa repetida. Olía a perfume y axila. Raquítico como una escoba, de pelo largo y mal cuidado. El personaje de la cuadra, a quien todo...
En aquel callejón bajo la luz mortecina tu mirada se cruzaba con la mía. Ojos de serpiente boca de lava ardiente
La mujer ha nacido para luchar, y… batalla.
Me iré, y mi voz sonó más fría que… y más profunda que el mar de sus ojos océanos de lágrimas derramé en aquel silencio etéreo
Aullé como los lobos bajo la luna el dolor quemaba mis entrañas aullé de rabia, ira, cólera, furia al verla llorar