Hay en el lago aroma a flor de loto. Llega a mi barca. Un nuevo día trae la primavera.
Mis piernas pisan fuerte en el calor del verano calles solitarias donde los tacones resuenan. Dentro de la falda muslos firmes
Llegué a casa después de un largo día, agotado, deseando irme a la cama. Me tiré en el sofá, después de cinco minutos, me levanté, corría el riesgo de dormirme allí y deseaba ducharme, ...
La brisa tibia de tu aliento en mi rostro trayendo un beso. Va abriendo nuestros labios y cerrando los ojos.
Hubo espacio en MI carne para ti, que deseas el querer de mis días mis besos fueron versos, melodías con poemas todo mi amor te di Amor tan nuestro, el alma me bebía…
Esa sonrisa que está en mi cara pálida, es tuya amor. Alados brazos abrazan esas almas,
Ojos del alma azabache cabello nácar su cara En alta mar rompiendo va las olas
Cubre la nieve la cabaña de troncos. Día de sol. Fluye el riachuelo entre la nieve blanca.
Pétalos rosas Mariposa posada center lengua libando Haiku
La noche huele a primavera, a piedra fresca, y a humo lejano de hojarasca. Huele a gato, a farola, a silencio y a montaña.
Radiante el día transcurre en una suerte de saudad… rayos de sol entran por los visill… iluminando mis piernas largas, entreabiertas y anhelantes.
Estoy en casa son las doce de la noche y estoy con la música a toda pastilla. Quiero dejar de oír
Suena la música la orquesta toca jazz. Canción de luna de una ciudad rendida, al swing tan lleno de alma.
Nunca te mirarán a los ojos como y… con el amor saliendo de mis pupila… con el abrazo silente de mi respir… Nunca te besarán como lo hice yo bebiéndome la vida de tu boca
En el silencio de aquella buhardilla sentí tu aliento. En la piel de mi nuca me diste un beso,