Estas endechas expresan la profunda tristeza que deja la pérdida de un amigo, utilizando versos breves y melancólicos para capturar la sensación de ausencia y la soledad que sigue a su partida
Es un largo desierto el que me lla… una vasta tierra sin eco ni canto, una herida abierta de frío y espan… donde mi paso sin rumbo se inflama… No hay luz, ni sombra, sólo la lla…
Rayo rojo, fuego sagrado, Metatron, ángel de poder elevado. Desde el trono de Dios, desciende… Irradiando fuerza, valentía y auto… Arcángel de la voluntad divina y e…
Vivir no es solo andar, es hallar el sentido en cada paso, saber cuándo parar, gozar sin gran retraso el sol, la risa, el vino y el abra…
En la mejilla, una lágrima, destil… Silencioso río de penas sin nombra… Fluye hacia el piélago trágico, de… Donde los suspiros zozobran sin ce… Lloran los recuerdos, gélidos dest…
Siguiendo siempre tus pisadas, Mensajes que me dan consuelo, Tu luz, brillante como estrellas, Guía mi rumbo con anhelo. Tu ser, un faro en la tormenta,
Cuando el día se apaga, miro tus o… Cuando la noche despierta, busco t… En la calma del viento, sueño tus… En el fuego del tiempo, pierdo mis… Son estrellas que brillan como tus…
En la bruma de la mañana, donde los recuerdos se deslizan, las risas se convierten en ecos, y el tiempo, un amante distante. El amor, un juego de sombras,
Hay un mar suspendido en tu cielo, un azul que se agita en tu mirada, como olas que buscan su consuelo en la orilla serena de mi nada. Brilla el sol en tus iris, luz de…
En el caos de mi andar, donde el tiempo se desdibuja, la infancia se escurre, como arena entre los dedos. Las sombras de lo que fui,
Bésame, amor, con labios encendido… sacia mi sed con tu boca de amapol… embriágame con tu aliento florido y abraza mi alma con tu piel de ol… Deja que mis manos recorran tu cue…
Desde mi ventana se ve otra ventan… no un árbol, no el cielo o el mar, solo un reflejo de vida lejana, otro mirar que anhela soñar. Alguien se asoma, callado, esperan…
—¿Vendrás cuando la bruma esté enc… y el bosque guarde el oro del ocas… —Iré, si tu silencio me da paso, y encuentro tu presencia detenida. —¿Dirás mi nombre, sombra bendecid…
Oh, tierra mía, que en mis venas a… tierra de mares y montes sagrados, eres mi piel, mi sueño, mis amores… eres el alma de mis pasos dados. En cada palma que el viento mece,
La luz de Cristo, faro encendido, es fuego eterno, amor desmedido; en sombras profundas, en densa neg… su resplandor vence toda amargura. Cuando la noche se cierne en la vi…
No soy la sombra de lo que poseo, ni la riqueza que brilla en mis ma… no soy el traje de tela dorada ni el frío mármol que guarda mi no… No soy el rostro que el tiempo des…