Encadenado a tu dulce mirada, Soy esclavo de tu amor, mi amada. Tu corazón, mi dueño y mi señor, A tus pies, me rindo con fervor. Como fiel amante, te venero,

En la quietud del valle florecido, el sol besa la tierra con su rayo. Los árboles susurran al oído, y el día se despliega sin desmayo. Las abejas zumban en la pradera,

Te extraño en cada respiro, En cada rincón recóndito y oscuro. Te añoro en cada destello de tiemp… Mi corazón anhela tu regreso, te i… Tu risa, como melodía cautivadora,

Veracruz, puerto querido Puerta de entrada a México De historia estás bien vestido Y de cultura eres foco Olmecas, totonacas

Dicen que el amor es un don sagrad… Sueño dorado, tesoro añorado, Un elixir que eriza el cuerpo hela… Eleva el alma, un vuelo liberado. Susurra versos, laúd encantado,

El amor, melodía silenciosa, resuena en el pecho con fervor. Como brisa suave, deliciosa, despierta el alma con su calor. Dos miradas se encuentran, chispea…

Bajo las altas copas verdecidas, Siento la vida brotar a raudales. Aroma a musgos y a hojas caídas, Arrullado por cantos naturales. Paz y sosiego en la espesura,

Voy hurgando pecho adentro, por los silencios del alma, buscando la dulce calma que habita en su hondo centro. En praderas del encuentro,

El vino puede sacar esas cosas que el hombre calla, cuando el alma se halla en sus redes sin cesar. Se empiezan a revelar

Tu mano, cual caricia tierna, Despierta mis sentidos en su senda… Primicias que enseñan con primor, El vigor de las delicias con ardor… Como pétalos danzantes al viento,

En campos verdes va el viento, susurran flores al pasar, bajo el cielo, puro y lento, los sueños empiezan a brotar. Que vengan versos de esperanza,