Sencillo de mi parte
“Preso ciego en cárcel de inocentes, auto inamovible de conductor mocho, motores pretenciosos de personas quejosas, las calles se molestan y se ponen negras.
“La clorofila es ambivalente, y el odio, permanente. Pobres idiotas; inteligentes sin similitud, corazones con sangres amarillas y óxido que destila vida.
“Confundido estoy como tú de mis poemas; la vecina Ojos sueltos, las piernas me llamaron... ahora sé qué es experimentar el adulterio.
“Chichiguas rumiantes y saxofones sin respiración.
“Ensanche la Fe sin esperanza y República sin dominicanos.
“La hilaridad se consternó y el abrazo me rechazó, ¿quién soy yo para negar la solicitud de ellos?
“Ahora los gordos no tienen grasa, pero los flacos están llenos de odio.
“¡Maldita sea! ¿Cómo rayos colaboraré con una nefasta gente?
“Vete lejos de mí mientras pretendes salvarme, el pasaporte me salvará de ti cuando no me veas...
“Enlutadamente soy tardo de velocidad... y rápido de aceleración.
“No te miento, estás viciada de Leucemia cara.
“Cuando mueras como Duarte, enfrentes como Caamaño y respondas como Orlando:
“Te asemejaré como lo hizo Pedro Mir”.
Esta prosa pertenece al libro: Juventud con sonrisas inexactas y corazones amargos. Esta prosa la hice mientras vivía con mi abuela de parte de padre, estando en el Ensanche la Fe. Luego, crucé la calle y me adentré en el callejón de mi amigo Richard Almengó Medina, y terminé esta prosa en su casa.
