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Irás sobre la vida de las cosas

Irás sobre la vida de las cosas
Con noble lentitud; que todo lleve
A tu sensorio luz: blancor de nieve,
Azul de linfas o rubor de rosas.
 
Que todo deje en ti como una huella
Misteriosa grabada intensamente:
Lo mismo el soliloquio de la fuente
Que el flébil parpadeo de la estrella.
 
Que asciendas a las cumbres solitarias,
Y allí, como arpa eólica, te azoten
Los borrascosos vientos, y que broten
De tus cuerdas rugidos y plegarias.
 
Que esquives lo que ofusca y lo que asombra
Al humano redil que abajo queda,
Y que afines tu alma hasta que pueda
Escuchar el silencio y ver la sombra.
 
Que te ames en ti mismo, de tal modo
Compendiando tu ser, cielo y abismo,
Que sin desviar los ojos de ti mismo
Puedan tus ojos contemplarlo todo.
 
Y que llegues, por fin, a la escondida
Playa con tu minúsculo universo,
Y que logres oír tu propio verso
En que palpita el alma de la vida.
Preferido o celebrado por...
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