En alto bar me encuentro, viñedond… las uvas en su andar añejoviales, jugotean, traviesas, sus ovales empujando al alcohol para que rond… A la ebriedad cumplida corresponde

La tercera edad hizo de las suyas expropiándole poco a poco piel a piel la donosura a la modelo.

Más acá de los ojos, le delego a mi entraña la voz. La luz, ingen… se afirma, en mi interior iridisce… como un ficticio, mentiroso fuego. Más acá de los ojos, cuando juego

Va de pasión en fondo por las call… alineada la masa. Pasa en ellas su tráfico iracundo. Cada gente hace un mínimo cráneo con su mano para poner en él

No es verdad que el espacio sirva como lugar en que se citan oquedades, rendijas, intersticios celebrando el congreso de la nada. No es el telón de fondo

Te amo con los principios esencial… que aprendí de la lógica: primero, con el de identidad: en ti me espe… y salgo a despedirme cuando sales. Después. como seguimos desiguales

En la noche brilló, móvil, la rosa… en pedestal de mármol perfumada. La mano, hacia su tacto reclinada, se acercó a los rubores, tembloros… Excitación y arrojo. Peligrosa

En el archivo de las sienes reuní las pruebas y los testimonios irrefutables: hice, de estados de ánimo, un jura… inicié el juicio,

Surcando un marmonioso, la navela semeja un aveloz de plumarina. La lluviáspera ladra, huracanina, y el fuerte pescador se redesvela. El barcófago deja su piestela

Nos revolcamos en el lecho la culpa, tú y yo. ¡Qué intercambio, amor mío, de fronteras! Durante horas

Mi lengua en tu pezón buscando endurecerlo para ablandar así tus reticencias. Mis manos correteando tu blancura.

Cuando bajas los ojos, sé que enfr… adviertes cómo cae una manzana; el sendero, al decírtela cercana se erige en tentación y es un serp… La manzana (y tu cuerpo) con el di…

Jurídicamente hablando, yo no soy dueño de ninguna de las… Y aun mi derecho sobre las maripos… discutible. No tiene sentido

Al sol trapos y llagas. Confidenc… Él me escuchó callado. Comprendía.… Mis entrañas perdieron la prudenci… y volqué a la intemperie mi agonía… Por largos años fui la reticencia,…

Tras de mi nacimiento, saltando con mis células, creciend… pude ascender al punto en que oyendo las voces del camino… los murmurios finísimos de un polv…