La tarde gris y triste me agobia, tengo sueño; estiro lentamente mis dos brazos abiertos que se prenden al aire;

Aprovecha esas alas que te brotan… y cumple—es el momento— con tu misión de arcángel.

¿Para cuándo la lluvia y su gozo ahilado a punto de estrenar su virginal sa… que nos bautiza siempre? Para qué vida rota

Es escribir a alguien o lanzarse al silencio, a nadar en lo oscuro, a encender una llama aunque ahoguen las dudas.

Todas las soledades—grises víboras… la duda que taladra mis sienes aba… Nadie finge camino en torno de mis… que repliegan, medrosas, su impuls… ¡Soledad de mi frente1 Un residuo…

Tú no sabes qué lejos. ¡Nadie sabe qué lejos! Encima de las nubes, detrás de las… al fondo del abismo en que se arro… sobre el monte invisible donde due…

Inercia de la muerte. ¡Qué distan… me aleja ya, segura, de lo humano! Aquella rosa que murió en mi mano será pronto recuerdo de fragancia. Silencio de silencios. En mi esta…

No fue para mí... Ya lo suponía. Pero sé engañarme tan bien con mentiras y jugar al juego

Puliré mi belleza con los garfios… Seré tuya sin forma, hecha polvo d… diluida en un cielo de planos invi… Para ti quiero, amado, la posesión… el delirio gozoso de sentir que tu…

Todos van, todos saben... sólo yo no sé nada. Sólo yo me he quedado abstraída y lejana, soñando realidades,

Amor de cada instante... duro amor sin delicias: cadena cru… gloria ausente, esperada, gozo y tortura a un tiempo; realidad de los siglos, gracias po…

Que no me vuelva atrás; que siga y no me importe dejar en el camino mis últimos des…

Iré a tus manos, limpia, indemne,… renacida de ti y ajena a lo tuyo, iré a tus manos casta, desnuda de tus besos. Sentirás al ceñirme que una rosa d…

                II