Yo me alivié a un pino verde por ver si la divisaba, y sólo divisé el polvo del coche que la llevaba. Anda jaleo, jaleo:

Por las orillas del río se está la noche mojando y en los pechos de Lolita se mueren de amor los ramos. Se mueren de amor los ramos.

En la noche del huerto, seis gitanas, vestidas de blanco bailan. En la noche del huerto,

Salen los niños alegres De la escuela, Poniendo en el aire tibio Del abril, canciones tiernas. ¡Que alegría tiene el hondo

¡Qué esfuerzo! ¡Qué esfuerzo del caballo por ser… ¡Qué esfuerzo del perro por ser go… ¡Qué esfuerzo de la golondrina por… ¡Qué esfuerzo de la abeja por ser…

Muerto se quedó en la calle con un puñal en el pecho. No lo conocía nadie. ¡Cómo temblaba el farol! Madre.

Por el East River y el Bronx los muchachos cantan enseñando sus… con la rueda, el aceite, el cuero… Noventa mil mineros sacaban la pla… y los niños dibujaban escaleras y…

Duérmete, niñito mío, que tu madre no está en casa; que se la llevó la Virgen de compañera a su casa.

Fuera la lluvia cae sin cesar... En mis cristales viene a tocar su sinfonía:

En el café de Chinitas dijo Paquiro a su hermano: «Soy más valiente que tú, más torero y más gitano». En el café de Chinitas

¡Fita aquel branco galán, olla seu transido corpo! É a lúa que baila na Quintana dos mortos. Fita seu corpo transido,

Los caballos negros son. Las herraduras son negras. Sobre las capas relucen manchas de tinta y de cera. Tienen, por eso no lloran,