POEMA DE LA SOLEÁ
#Andaluces #Asesinados #Españoles #Gays #Generación27 #Granadinos #GuerraCivilEspañola #SigloXX #PoemaDelCanteJondo (1921-1922)
Por una vereda venía Don Pedro. ¡Ay cómo lloraba el caballero! Montado en un ágil
Enrique, Emilio, Lorenzo. Estaban los tres helados: Enrique por el mundo de las camas;
Por las orillas del río se está la noche mojando y en los pechos de Lolita se mueren de amor los ramos. Se mueren de amor los ramos.
Así te vi La joven muerta en la concha de la cama, desnuda de flor y brisa surgía en la luz perenne.
Muerto se quedó en la calle con un puñal en el pecho. No lo conocía nadie. ¡Cómo temblaba el farol! Madre.
Rosa futura y vena contenida, amatista de ayer y brisa de ahora… ¡quiero olvidarlas! Hombre y pez en sus medios, bajo c… esperando en el alga o en la silla…
La Carmen está bailando por las calles de Sevilla. Tiene blancos los cabellos y brillantes las pupilas. ¡Niñas,
La muerte entra y sale de la taberna. Pasan caballos negros y gente siniestra
Un bello niño de junco, anchos hombros, fino talle, piel de nocturna manzana, boca triste y ojos grandes, nervio de plata caliente,
Este galapaguito no tiene mare; lo parió una gitana, lo echó a la calle. No tiene mare, sí;
En la redonda encrucijada, seis doncellas bailan. Tres de carne
Teta roja del sol. Teta azul de la luna. Torso mitad coral, mitad plata y penumbra.
Los cien enamorados duermen para siempre bajo la tierra seca. Andalucía tiene largos caminos rojos.
¡Qué esfuerzo! ¡Qué esfuerzo del caballo por ser… ¡Qué esfuerzo del perro por ser go… ¡Qué esfuerzo de la golondrina por… ¡Qué esfuerzo de la abeja por ser…
Sólo tu corazón caliente, Y nada más. Mi paraíso, un campo Sin ruiseñor Ni liras,