Cae la noche en el silencio de los árboles que aún no los despierta la mañana, el día sigue y continúa despejando todos los aires nocturnos del ambiente, la humedad recorre los más lugares recónditos de la tierra donde al calor de los cuerpos las criaturas se agrupan juntas para darse calor, aún en este momento la tierra tiene su descanso merecido después de un día de trabajo natural y milagroso, mañana al salir el sol Dios dejará que vuelva a ocurrir el milagro de la vida que transcurre frente a nuestros ojos pero que la mayoría no podemos si quiera disfrutar porque estamos inmersos en los problemas del mundo los cuales todos son pasajeros y la naturaleza inmortal, el cielo emana toda su sabiduría con la estrellas escribiendo historias tan fantásticas de héroes, leyendas y brillan entre las nubes asomando cada vez más su grandeza,  quisiera poder vivir siempre viendo hacia las estrellas y recorriendo sus estrecheces y navegar irremediablemente y a mi gusto eternamente entre todas ellas... Que Viva La Vida