EL TEMBLOR
Hay gestos que no llegan al idioma… miradas que se quedan a vivir en el borde de un saludo. Te veo a veces, como quien roza un libro cerrado,
A veces, me pregunto si te lo dije todo, si alguna vez te conté la verdad completa. La respuesta es no.
Una vez me sonrió como si todo fuera posible. Y yo me fui, como si no.
Ferito dalla magia dei tuoi occhi, unto dalla dolcezza delle tue mani, assorbito dalla luce
Te atisbo inútilmente me veo muy perdido siento que estas pero te has ido
piso tus grises piedras pulidas por el paso de los siglos entre las sombras que en tus call… tus torres se reflejan en las ventanas que la lluvia crea
¡Madre mía, qué juerza tieni’l sol cuando entra el veranu de golpe y… La tierra rezuma calor de caldera y la chicharra no calla siquiera. Desde bien temprano ya canta el ga…
No te veo como quien fui. No estás manchado de pasado. No sos la réplica de un amor adole… ni el eco de mis días con música a… y piernas sueltas en el verano.
Sus pasos se confundieron en la ni… y en el eco de su extravío, algo—frágil como el polvo— comenzó a latir.
altiva y perdurable tu grandiosa silueta forjada por los años, por la sangre y la piel de la gente sencilla
No pediré jamás los besos que me debes los abrazos sonrisas guiños
No se trataba de conquistar, sino de no huir. De sostenerle la mirada como quien sostiene un incendio en… sin soltarlo.
Los muros que esculpieron los despiadados hijos de la ira se yerguen majestuosos sobre los imbricados berrocales lejos de allí
cuando llegue septiembre volverán los anhelos a encontrarse respiraré de nuevo con tu risa cuando llegue septiembre los dorados destellos del ocaso
¡Ay, qué día, primo Antón! ¡Qué sol, qué gaita, qué vino! Las mozas reían como agua’l regatu y los mozus... ¡con les camisas ab… y el pecho al aire,