#Chilenos #Mujeres #PremioNobel #SigloXX (1924) Canciones Ternura cuna de
Antes que él eche a andar, está qu… el viento Norte, hay una luz enfer… el camino blanquea en brazo muerto y, sin gracia de amor, pesa la tie… Y cuando viene, lo sé por el aire
Muro fácil y extraordinario, muro sin peso y sin color: un poco de aire en el aire. Pasan los pájaros de un sesgo, pasa el columpio de la luz,
Las montañas se deshacen, el ganado se ha perdido; el sol regresa a su fragua: todo el mundo se va huido. Se va borrando la huerta,
Con el mentón caído sobre la mano… el Pensador se acuerda que es carn… carne fatal, delante del destino d… carne que odia la muerte, y tembló… Y tembló de amor, toda su primaver…
La riqueza del centro de la rosa es la riqueza de tu corazón. Desátala como ella: su ceñidura es toda tu aflicción. Desátala en un canto
En esta hora, amarga como un sorbo… Tú sosténme, Señor. ¡Todo se me ha llenado de sombras… y el grito de pavor! Amor iba en el viento como abeja d…
Aquel mismo arenal, ella camina siempre hasta cuando ya duermen lo… y aunque para dormir caiga por tie… ese mismo arenal sueña y camina. La misma ruta, la que lleva al Es…
Azul loco y verde loco del lino en rama y en flor. Mareando de oleadas baila el lindo azuleador. Cuando el azul se deshoja,
Yo no quiero que a mi niña golondrina me la vuelvan; se hunde volando en el Cielo y no baja hasta mi estera; en el alero hace el nido
El viento Norte viene levantándose, ladino, y aunque es más viejo que Abraham, así comienza de fino, y si no se apura el paso,
Vamos pasando, pasando la vieja Araucanía que ni vemos ni mentamos. Vamos, sin saber, pasando reino de unos olvidados,
La mesa, hijo, está tendida, en blancura quieta de nata, y en cuatro muros azulea, dando relumbres, la cerámica. Esta es la sal, éste el aceite
¡Pobre amigo!, yo nunca supe de tu semblante ni tu voz; sólo tus versos me contaron que en tu lírico corazón la paloma de los veinte años
Te voy a contar la hierba de cabellera soltada y latiendo y ondulando como llena de palabras. Es una niña en el gajo
Me acuerdo de tu rostro que se fij… mujer de saya azul y de tostada fr… que en mi niñez y sobre mi tierra… vi abrir el surco negro en un abri… Alzaba en la taberna, honda, la co…