A primeros de enero de un año cual… con amores y nombres seleccionados… con los huesos maduros a mitad de… me PROMETO solemne no sufrir de… Si me pegan, que peguen,

Mirad mi continente contenido brazos, piernas y tronco inmesurad… pequeños son mis pies, chicas mis… hondos mis ojos, bastante bien mis… Tengo un lago debajo de la frente,

Que estás en la tierra, Padre nue… Que te siento en la púa del pino, En el torso azul del obrero, En la niña que borda curvada La espalda, mezclando el hilo en e…

Algo me pasa que en mi pecho exist… Vuelan hormigas y discurren peces. Suena la sangre y el tambor convoc… Hay un incendio cerca de mi pulso. De nuevo el tigre lanza su mensaje…

Invade el mundo un ¡ay! un ay atroz, y siempre el ¡ay! del ¡ay! es ley… el ¡ay! porque no hay. El ¡ay de mí!

El camello se pinchó Con un cardo en el camino Y el mecánico Melchor Le dio vino. Baltasar fue a repostar

Una y una, dos. Dos y una, seis. El pobre burrito contaba al revés. ¡No lo sabe!

Vamos a ver si es cierto que Le a… vamos a mirarnos por dentro un poc… ¡Hay cosas colgadas que a El le l… freguemos el suelo y abramos las p… e salgan las lagartijas y entren l…

...Y bendito sea Dios por el enja… de besos rodeando mi colmena y bendito otra vez por esta pena cómoda de saber que alguien me bus… ¡Que me encuentre temprano!

Cada abeja con su pareja. Cada pato con su pata. Cada loco con su tema. Cada tomo con su tapa. Cada tipo con su tipa.

Soy tan pobre tan pobre, que no tengo ni madre. Soy tan pobre tan pobre, que no tengo ni nadie. Que no tengo ni abrigo

Si el mar es infinito y tiene rede… si su música sale de la ola, si el alba es roja y el ocaso verd… si la selva es lujuria y la luna c… si la rosa se abre y perfuma la ca…

A veces quiero preguntarte cosas, y me intimidas tú con la mirada, y retorno al silencio contagiada del tímido perfume de tus rosas. A veces quise no soñar contigo,

Doce cerditos Ocho tetitas tiene mi cerda, ocho tetitas —y orgullosa de ellas.

La iguana es un dragón enano A la iguana la puedes acariciar con la mano. Al dragón, no. La iguana raspa