¡espera! ¡no te vayas! ¿De parte de quién es? ¿Quién dij… Besos que yo esperé, tú me has dej… en el ala dorada de mi pelo. ¡No te vayas! ¡alegra más mis flor…

Con la bufanda del río Toledo se abriga del frío. Con la campana mayor, se quedó sordo un señor. Con la tajada del tajo

Todo es bello en el Niño, pero sus ojos, no sé qué tienen, madre, que me enamoro. Todo es bello en el Niño,

Cuando un árbol gigante se suicida… harto de estar ya seco y no dar pá… sin esperar al hombre que le tale, sin esperar al viento, lanza su última música sin hojas?s…

Si el mar es infinito y tiene rede… si su música sale de la ola, si el alba es roja y el ocaso verd… si la selva es lujuria y la luna c… si la rosa se abre y perfuma la ca…

Doce cerditos Ocho tetitas tiene mi cerda, ocho tetitas —y orgullosa de ellas.

La gente corre tanto porque no sabe dónde va, el que sabe dónde va, va despacio, para paladear

Las cosas, nuestras cosas, les gustan que las quieran; a mi mesa le gusta que yo apoye lo… a la silla le gusta que me siente… a la puerta le gusta que la abra y…

Don Pato y don Pito dan un paseíto. —¡Qué suerte, don Pito, me encontré este güito! Y los dos le quiere

El dolor envejece más que el tiemp… este dolor dolor que no se acaba, y que te duele todo todo todo sin dolerte en el cuerpo nada nada… A tantos días de dolor se muere un…

Ya ves qué tontería, me gusta escribir tu nombre, llenar papeles con tu nombre, llenar el aire con tu nombre; decir a los niños tu nombre

En mi cara redondita tengo ojos y nariz, y también una boquita para hablar y sonreír. Con mis ojos veo todo,

Duérmete, mi gata Chundarata, se han dormido los juguetes y tú sigues dando la lata. Duérmete, que es la una. Duérmete, mi cascabel

Una y una, dos. Dos y una, seis. El pobre burrito contaba al revés. ¡No lo sabe!

Presiento la rosa en el tallo dorm… presagio la caricia y presiento la… Y el beso que han de darme, y el llanto no nacido humedece mis dedos