Quizá me idealizaste, quizá pensaste que seria alguien de atributos hermosos;
alta, cabello largo y liso.
Ojos grandes, nariz respingada, labios medianamente grandes y mejillas pequeñas con un rosto delicado.
Pero si embargo te encontraste con todo lo contrario, te encontraste con alguien de rostro cotidiano, de rostro indiferente, de ojos apagados.
Con un cuerpo desorbitante, sin cuidado, sin delicadeza y feminidad, te encontraste con eso.
Yo sin embargo, sabia con que me iba a encontrar, y así fue, sabia de tu delicadeza pero que por tus ideas quizá no te importaría lo físico, que soñadora fui.
Ahora ya no me escribes, quizá si nunca nos hubiéramos visto, si nunca  te hubiese invitado ese helado, helado que nunca comimos porque preferiste irte antes de pasar un solo segundo más conmigo.
Quizá si todo se hubiese quedado en simples mensajes de textos, en la ilusión, en la idealización de uno por el otro, quizá, hasta el momento me alegraría por cada mensaje tuyo.
Ahora no estas, te has ido y esas emociones desaparecieron.
Te has desilusionado, creías que alguien con gustos a los tuyos podría quizá ser atractiva, pero no...
Donde estes, no dejes de buscar el amor que crees que te corresponde... donde estes.
Y yo, yo no, yo no me perdonare por ello, no podre conocer a alguien como tu nunca mas, y si encuentro a alguien quizá como yo, ese no serás tu y tampoco seré yo, es por eso que no te olvidare, no olvidare lo que fuimos y lo que pudimos ser.
Donde estes, no dejes de buscar la belleza del amor, donde estes ya no seré yo...