Poema 27
Libro: Muerte y Vida de un quetzal .
Hoy tu recuerdo solo es un recuerdo triste y vacío.
Quisiera ser más amable con tu recuerdo pero me es imposible.
Aun recuerdo cuando yo aun te amaba
y tengo tan presente cuando mi corazón dio un vuelco al escucharte gritar.
Mátenlo, mátenlo, mátenlo!
La sensación que me provoco ese sonido es inefable
para las miles de palabras que existen en mi vocabulario.
Fue un sentimiento tan abrumador que aun me es dificil asimilar.
Antes de escuchar ese sonido estaba dispuesto a luchar y aceptar la ira de Dios por ti.
Mátenlo, mátenlo, mátenlo!
Tal vez ese día no morí,
no niego que me hubiera encantado cumplirte ese ultimo anhelo.
Y no seguir recordando tus ultimas palabras de amor por mí.
Mátenlo, mátenlo, mátenlo!
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