Pastor, ¿cuál ocasión, cuál cosa e… qué infortunio cruel, cuál fiero h… te trujo a apacentar nuevo ganado tan lejos de tu bien, a esta monta… La nueva novedad de tal hazaña

Mientras las tiernas alas, pequeñu… mi nuevo desear firmes hacía, mientra de mí alejarse no podía, por ser nueva la pluma, a mayor vu… obediente me estaba, y al señuelo,

Vete, falsa visión, no me atorment… déjame estar, que no quiero creert… mi ventura consiste en que no acie… tú quieres que lo sepa yo y las ge… Vete, temor villano y no me cuente…

¡Oh sol, de quien es rayo el sol d… en cuyo resplandor es alumbrada el alma, que en tinieblas sepultad… vivió hasta verte, oh sol, en este… No sufras, claro sol, que obscuro…

¡Ay, qué plazo tan largo y tan ext… ay, qué término luengo y enojoso, ay, qué tiempo prolijo y trabajoso… ay, qué tardío remedio a tan gran… ¡Ay, salud perezosa y con engaño,

Dama, tan claro en vos Amor me mu… de su cautela la experiencia clara que si el alma engañar no se dejar… en vuestro gesto vio la clara mues… La culpa de Amor fue, la gloria v…

Si no os digo verdad, si en algo o… sobre mi vida torne el desengaño; si falta hay en mi fe, si os trato… dolor no quepa en vos del mal que… si no sois causa vos del mal que s…

Si puede honrar una famosa muerte la más infame y deshonrada vida, si la muerte con honra recibida en gloria del que muere se convier… venturoso lacayo, a quien la suert…

¡Ay, sabrosa ilusión, sueño süave!… ¿quién te ha enviado a mí? ¿Cómo v… ¿Por dónde entraste el alma o qué… a mi secreto por guardar la llave? ¿Quién pudo a mi dolor fiero, tan…

Gran señal es el ver que me arrepi… para pensar que ya conozco el daño… pues me quiero apartar de un mal t… señal es que lo entiendo y que lo… Mas ¿quién me dará, Amor, atrevim…

Sesenio, pues que vas do vengo ago… antes do siempre estoy, do ir quis… cuando a ver llegarás la gran ribe… del Betis, que por ti tanto se hon… si aquella Brisis que tu alma ador…

Ojos, rayos del sol, luces del cie… que con un volver manso y piadoso, en el trance más fuerte y peligros… me solías de dar mayor consuelo, ¿qué ceño tan cruel, que oscuro ve…

¡Oh pasos, tan sin fruto derramado… oh alto y peligroso pensamiento, oh memoria, ocasión de mi tormento… oh ardor, no mortal, mas de dañado… ¡Oh flaco corazón, graves cuidados…

Con ansia que del alma le salía, la mente del morir hecha adivina, contemplando Vandalio la marina de la ribera bética, decía: «Pues vano desear, loca porfía,

Si jamás el morir se probó en vida… yo triste soy el que lo pruebo y s… con extraño dolor, pena y tormento… en esta trabajosa mi partida. Mi alma en vuestro gesto embebecid…