Loading...

Otro día.

Así como comienza, termina. Baja el sol, muchos duermen. Yo recopilo mis imagenes y las repaso en mi memoria... recuerdo los fantasticos arboles que ya no me parecen fantasticos, solo arboles. Tomo nota cada vez menos acerca de como el mundo me sorprende, quizas porque ya no lo hace. Su capacidad de sorpresa es la misma, pero me he vuelto menos receptivo. Tiempo, supongo.

Y pequeños placeres que me mantiene vivo o cuerdo, creo que es lo mismo.

Ironicamente cuerdo, estoy en la cuerda floja. Pocas veces sopla el viento... pero soplará. No me sorprendería volverme loco un día, o en este día, si algo terriblemente neutral me ocurre: no querer ni despertar.

Recuerdo que el café cortado me dio mucha sed. Recuerdo el azucar, esa pequeña cucharada de más que fui agregandole a mis desayunos... Hoy no hablaré de galaxías, ni de amor, ni de oscuridad, sólo de mi estomago, de mi somnolencia, y algunas cosas que eso son, cosas.

Y por no pagar la versión Premium de esta aplicacion, ahora mismo recibo una publicidad de una hamburguesa... que el mundo ya no tiene nada de mundo. Realmente me gustan mis sueños, dormir, y en este día dormí poco, soñé mucho, pero no recuerdo más de dos palabras, dos imagenes, dolor al abrir los dos ojos.

Liked or faved by...
Other works by Héctor Flores...



Top