Cargando...

Apenas vida

Cada día es un rayo cegador
hundido en tierra,
cada instante una perdida gota.
Noche a noche algo cambia
por una insignia oscura,
una pluma ya inútil para el vuelo.
Como lluvia que cae
por los techos,
la vida va bajando
por caminos quebrados,
perdiendo su olor de ayer, salvaje,
su candor de creerse
desatada y radiante y duradera.
No es raro
que una paciencia amarga
suela cubrirnos
como una triste tierra anticipada.
Preferido o celebrado por...
Otras obras de Ida Vitale...



Top