Te suelto
Te suelto, sin querer soltar tu recuerdo.
Te suelto, sin soltar la carne de tus labios esos labios que se convierte en el peso de mi partida.
Te suelto porque soltándote el éxodo de aquellos besos llegaran renovado a otros labios.
Te suelto porque solo soltándote seré libre aunque no hubo más libertad en mi alma cada vez que experimentaba este estado incorpórea tras darme esos orgasmos.
Te suelto con la idea de que soltándote a ti estoy más en mí y en otros labios volveré a revivir.
Te suelto y me encuentro a mí...
