Y pasa que siempre les hablo de ti, siempre... En ocasiones te cito como si fueras aquella brisa pasajera que te da un respiro para seguir o un descanso para acabar.

Y te menciono... Te menciono como si fueras un golpe de dolor, como si fueras luz de luna o de sol y como uno de esos gritos que de la nada dicen un nombre pero que no sabes quién fue el autor de esa voz.

Y me refiero a ti como una metáfora de esas que no se entienden para nada en un principio pero que después va alcanzando un leve sentido, me refiero a ti como una ironía; como un problema que viene a solucionarlo todo.

Y te nombro al fin en los días de invierno, noches estrelladas y tardes de poesía y memorias;
Porque es ahí cuando les hablo de ti...