Dulce Luna
El mayor sacrificio no es darte el derecho a la vida
El mayor sacrificio no es comprar pañales
El mayor sacrificio no es desvelarse por tus lagrimas o quejas mal habidas
El mayor sacrificio es no poder ver tus primeras señales
No poder estar a tu lado, siendo tu fiel compañia
Ni poder prevenirte de tantos males
No saber si lloras o sonríes cada día
Cuantos sueños cumplo trabajando sin dormir
Seré el lobo que te arrulle en tu cuna
Si mi boca se convierte en curva al imaginar que podemos juntos vivir
Tu eres mi hija, mi dulce luna
Te querré, amaré y cuidaré hasta el día en que deba partir.
