Volveré a divagar en tu imagen está noche, tan difusa como distante; oiré entonar aquella canción, sofocante e incitante veré caer mi llanto nuevamente y nuevamente he de extrañarte desvelarme parece mi mejor opción; mientras dormirás a lado de tu amor, pienso, será otro amanecer desolado, tan carente de tu presencia y embriagado en mi dolor desvaría mi conciencia; entre tanto, la coherencia de olvidarte desfallece, miro ausente tu figura entre mi cama, siento el paso penetrante a la locura, pues mi calma se convierte en arrebatos, con premura cierro la puerta de este cuarto marchitado, dejando fuera a mis fantasmas, reflexión en los segundos compartidos contigo, mi amada, he impaciente busco el fallo cometido entre mis actos, con cinismo desvarío entre las sábanas deseando fueras la cura de mi karma. Ya vacío y desvalido me cuestiono con recelo ¿veré llegar algún día el alivio para mi alma o será esta noche que asesine mis suspiros?.
En veces, el amor que se entrega a una persona llega a ser tan grande, que las noche parecen ser eternas y la cama suele ser un tormento; para mí y gracias a tantos desvelos de escribir un poco lo que siento espero y les guste...