No estás aquí
Por qué no estás aquí justo a mi vera,
que no aspiro el mismo aire de tu boca,
que mi mano tendida no te toca
ni nos besa la misma primavera.
Hoy ya no es todo igual, como antes era,
que mi sombra vagaba como loca,
y yo arrastraba un corazón de roca
entre guijarros de mi gris pradera.
Hoy añoro sereno tu venida,
sin ti todo mi ser está inconcluso...
La voluntad de aquél sea bendecida
que aquí en mi corazón su mano impuso,
quien decidió premiarme con la vida,
y al compartir su amor, así dispuso.
2016-04-20
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