A usted le doy una flor, si me permite, un gato y un micrófono, un destornillador totalmente en de… una ventana alegre.

Respiración oscura de la vulva. En su latir latía el pez del légam… y yo latía en ti. Me respiraste en tu vacío lleno

Cae la noche. El corazón desciende infinitos peldaños, enormes galerías, hasta encontrar la pena.

No me dejes vivir. Ahógame en lo alto. Sobre tu cuerpo enfurecido. No me dejes vivir... Hay navíos que abaten en el largo…

La mujer estaba desnuda. Llegó un hombre, descendió a su sexo. Desde allí la llamaba a voces cóncavas,

Tu cuerpo puede llenar mi vida, como puede tu risa volar el muro opaco de la tristeza… Una sola palabra tuya quiebra

Ahora, amiga mía que una flor de papel preside el a… que el aire se deshace en dulces p… de jadeante miel en tus rodillas, ahora que no hablamos del otoño

Cuando ya no nos queda nada, el vacío de no quedar podría ser al cabo inútil y perfec…

Y ahora danos una muerte honorable, vieja madre prostituida, Musa.

No estabas tú, estaban tus despojo… Luego y después de tanto morir no estaba el cuerpo de la muerte. Morir

Por una espesa y honda avenida de árboles que unen en lo alto su copa y pesadumbre el sueño avanza. Abre sus grandes alas,

Ya baja mucha luz por tus orillas, nadie recuerda la invasión del frí… Ya los sueños no bastan para darle razón de ser a todos los suspiros. Tú cantas por el aire.

Amarillea amargo el tiempo y no hay tiempo para más desdecir la muerte. Marinero que llevas la barca del pasar,