(1947)
#Españoles El Poeta de los muertos pintor poeta y De libro
La tarde quiso cantar una cancion larga y clara y un gran suspiro de luz se le murio en la garganta. Tristes lirios cenicientos
CABALLO, siempre hijo, nieto de… padre de dulces potros engendrados… y engendradores de engendradores e… sin mí cuando mi corazón sea un as… Hermosa bestia dura, la antigua ti…
Cuando estoy preguntando y, de rep… levanto a Ti los ojos y me callo, entonces es, Señor, que Tú me esc… y te hablo. La luz crece en mi alma, dulcement…
Si supiera, Señor, que Tú me espe… en el borde implacable de la muert… iría hacia tu luz, como una lanza que atraviesa la noche y nunca vue… Pero sé que no estás, que el vivir…
Atardecer de marzo en la mar cenicienta. El crepúsculo, lejos. ya no se ve, se sueña. Atardecer de marzo,
¡Qué brisa se despertó en la madrugada palida! ¡Que asesinato de sombras ante las luces del alba! El gallo cantó a la aurora
Cuando todo, en el tiempo, era un… Tú creaste en la tierra, para que… la piedra enjuta y seca, los árbol… y mi corazón rojo, donde brama la… Pero yo no te canto, porque una lu…
Estabas aqui, detras ¡y yo te estaba notando! No te veia. No me dijo nadie nada. No te vi ni en ojos ni en espejos.
Has bajado a la tierra, cuando nad… y has mirado a los vivos y contado… Señor, duerme sereno; ya cumpliste… Puedes cerrar los ojos que tenías…
Esta piedra del tiempo que me apre… el corazón desnudo y lo detiene, es solo eternidad, agua parada en el mundo, sin sombras, de la mu… Sin noches y sin días, se va alzan…
Yo quisiera morir, cuando ya tenga mi sangre en otras sangres derrama… y ya mi corazón sea semilla que florezca su flor en otra rama. Porque entonces, Señor, mi tronco…
ESTE pálpito es solamente una pi… un pretexto cualquiera para la sor… Un dolor invisible va endulzando s… donde una verde yerba tiembla...
LA selva estremecida y, en las lu… de los ojos, gacelas presurosas huyen como horizontes asaltados, como estampidos tenues cuyo sentid… Con un son reposado cruje la garra
Todas las cosas son las mismas que ayer estaban en mi orilla: tierra inmutable y poderosa, cielo sereno y hondo arriba, piedras heladas donde el tiempo
Déjame que, tendido en esta noche, avance, como un río entre la niebl… hasta llegar a Ti, Dios de los ho… donde las almas de los muertos vel… Los cuerpos de los tristes que cay…