Cargando...

Tú, mi esposa

No se prescindir de tu sonrisa, porque le enseñe a mis ojos a amarla y a buscarla, a mi mente le enseñe a recordarla y corregirla, a mi yo, a cuidarla y producirla.
 
Con la sonrisa que portas, no hay otra cosa que yo pida, con eso me bastaría para sobrevivir a los desastres de la vida.
 
Aun estando en silencio, tu sonrisa me dice mil cosas, como que; aunque no me ames no dejarías de ser mi esposa, porque te quiero y con eso basta, porque te amo y que más da.
 
Deja que el mundo diga lo que tenga que decir, que nos juzgue la gente si nos tiene que juzgar, mientras tú mi amada estés conmigo el paraíso se puede incendiar.
 
Que si me gusta el romance, que si te gusta el dolor, nos guste lo que nos guste, nos ha de gustar a los dos, porque eres mi esposa y mi dueña, y yo soy tu fulgor.
 
Si la gente nos mira y se admira por nuestra corta edad, piensa que es una mentira y una total falsedad, pero tu sabes cariño, que lo que escribo lo digo, y todo puede pasar.
 
Así se niegue el destino, la vida o la divinidad, yo te amo, y tu me amas que más se debe necesitar.

(2014)

Preferido o celebrado por...
Otras obras de Pancho...



Top