El ruiseñor azul de mi entresueño sigue en el alba dándome su canto. Hay una luz naciente sobre el llan… y en «dejarse ir», un nuevo empeño… En la mujer desierta, ya sin dueño…

Flauta de sal, ayer; hoy dulce cañ… en que ya trina una esperanza nuev… que ni llovizna ni tristura empaña y ecos de plata por el campo lleva… Estéril es el valle de la saña,

En su caballo de ligero vidrio pasa la lluvia de este fin de invi… y yo siento sus cascos en el sueño en que de miedo y soledad me ovill… Como me faltan los oscuros brillos

Tómame ahora que aún es temprano y que llevo dalias nuevas en la ma… Tómame ahora que aún es sombría esta taciturna cabellera mía. Ahora que tengo la carne olorosa

Asida de una rama de neblina dialogo con mi ayer, oro y torment… La furia del clavel entre la menta enciende todavía la colina. Mientras la dulce tarde se asordin…

Lo quiero con la sangre, con el hu… con el ojo que mira y el aliento, con la frente que inclina el pensa… con este corazón caliente y preso, y con el sueño fatalmente obseso

Bajo el encanto sombrío De la tarde de tormenta Hay trazos de luz violenta En la amatista del río. Y siento la tentación

Como San Sebastián, blanco de dar… muero y renazco en noche y mediodí… Nada importan la herida y la agoní… los ramos del dolor, los goces tar… Mi escudo de palomas y de nardos,

En mi vega oriental, verde collado… fiesta siempre de grama a colorine… suenan flautas y violas y violines… desde el trino inicial, bien acord… Y desta hora matinal, a la de

Bajo las alas rosa de este laurel… Amémonos. El viejo y eterno lampa… De la luna ha encendido su fulgor… Y este rincón de hierba tiene calo… Amémonos. Acaso haya un fauno esc…

¡Si vieras qué cama tan suave es e… Cuando recién nace, verde claro y… Parece que uno durmiera entre pana… El plumón del bosque se me antoja… ¡Y tanto como hace que en él no me…

En el agua la estrella se refleja Como una lentejuela de oro vivo, O un lunar imprevisto en el motivo Gris y redondo de la charca añeja. Admiradas, absortas en la duda

Esmaltan el contorno entero de la… Y son cual pebeteros que aroman la… Recogiéndolas sufro por la glotona… De que no quepan todas en mi canas… Allí las plantó un mago para que c…

Ancho zurrón, ni pan moreno lleva, ni espiga antigua, ni naranja nuev… El vacío me hiela, ese vacío de arenal, de riscal, de seco río. Y mi laurel ya lejos, y el lucero

Tu rostro siempre en mi sangre, tu aliento sobre mi ensueño. No hay torrentes ni murallas, descansas sobre mi pecho. Van y vienen aves lentas,