#EscritoresArgentinos
Mira, no pido mucho, solamente tu mano, tenerla como un sapito que duerme así cont… Necesito esa puerta que me dabas para entrar a tu mundo, ese trocit…
A la sospecha de imperfección univ… este recuerdo que me legas, una ca… sucios. A la certidumbre de que el sol est… de que en cada grano de trigo se a…
Te amo por ceja, por cabello, te d… blanquísimos donde se juegan las f… te discuto a cada nombre, te arran… voy poniéndote en el pelo cenizas… que dormían en la lluvia.
Te amo por ceja, por cabello, te d… blanquísimos donde se juegan las f… te discuto a cada nombre, te arran… voy poniéndote en el pelo cenizas… y cintas que dormían en la lluvia.
La nobleza, las grandes palabras,… a esta ternura sin mejillas que to… a esta lengua sin labios que enten… Envilece un amor así que rebota en… o se va cayendo a pedazos de palab…
Sálvalo, mamita, sálvame tantas noches de naufragio… salva tu blusa azul (era en enero,… sálvalo todo, o salva lo que pueda… Esto se viene abajo, pretty mama,
Una idea incandescente se me vino… una antorcha que flameaba en lo al… pero sola y sin refuerzos talvez p… ya librada de hace tiempo por tu b… un cobarde que vacila entre el olv…
Como los juegos al llanto como la sombra a la columna el perfume dibuja el jazmín el amante precede al amor como la caricia a la mano
Empapado de abejas en el viento asediado de vacío vivo como una rama, y en medio de enemigos sonrientes mis manos tejen la leyenda,
Dime por qué todavía te deseo, por qué tu nombre vuelve como el hacha a la herida en una amarga visitación de medianoche, a la vera de un campo funerario donde las larvas multiplican hú...
El animal totémico con sus uñas de… los objetos que junta la oscuridad… el ritmo misterioso de tu respirac… que tu sudor dibuja en el olfato,… Entonces me enderezo, todavía bati…
¿Quién los ve andar por la ciudad si todos están ciegos? Ellos se toman de la mano: algo ha… entre sus dedos, lenguas dulces lamen la húmeda palma, corren por…
La lenta máquina del desamor, los engranajes del reflujo, los cuerpos que abandonan las almo… las sábanas, los besos, y de pie ante el espejo interrogán…
No sabré desatarme los zapatos y d… no me emborracharé bajo los puente… Acepto este destino de camisas pla… llego a tiempo a los cines, cedo m… El largo desarreglo de los sentido…
Su mono azul le ciñe la cintura, le amanzana las nalgas y los senos… la vuelve un muchachito y le da pl… poderes de liviana arquitectura Al viento va la cabellera oscura,