Que malo es amar, cuando uno o es amado, es como un trago de miel, cuyo final es amargo.
Como una playa sin palma, o una mañana sin sol, a pesar de todo aquello, no deja de ser amor.
El amor es algo hermoso, capaz de mover montañas, pero algo doloroso, cuando se ama y no lo aman.
Es como un trago amargo, que te roza la garganta, o como una pesadilla, de la que tratas y tratas.
Y no logras despertar, noche tras noche se repite, y sin poder evitar, hasta que al fin desiste.
Al poner punto final, con esto ya me despido, no deja
de ser amor, aquel no corespondido.